LA CARA OSCURA DE LA MATERNIDAD

Ser madres es algo maravilloso.

Un hijo te hace amar de verdad, sin condiciones. Amar hasta que duela.

Un hijo te saca una sonrísa incluso en los peores momentos de tu vida.

Cuando un hijo te dice que te quiere, te abraza con fuerza, deja de existir el mundo, tan solo importa ese momento.

Hay tantos y tantos momentos felices, momentos que te llenan el alma de inmensa felicidad.

Pero todo en esta vida tiene una cara oculta, una cara menos amable.

Y no, no me creo a esas madres pluscuamperfectas. Donde todo es maravilloso y divino. Donde no hay enfados, ni gritos, ni casa desordenada, ni pizza conjelada para cenar, ni necesidad de espacio propio como mujer…

Yo, al menos, soy perfectamente imperfecta.

Una de las cosas que peor llevo de la maternidad es el no dormir. Llevo dos años y cinco meses sin dormir.

Mi hija pequeña es maravillosa, simpàtica, cariñosa, nos tiene a todos enamorados. Pero… para dormir es malísima! Que le vamos a hacer? La vida no puede ser perfecta!

Y noche, tras noche, tras noche.. sin dormir bien, despertandome cada dos por tres, acaba conmigo. El hecho de no descansar influye en muchísimas cosas. A parte del agotamiento físico, está el mental. En mi caso, me hace tener menos paciencia, estar más irritable. Y claro, los que están a mi alrededor pagan el pato.

También añadiría el hecho de que la paciencia no es precisamente algo en lo que vaya sobrada. Y a veces si tengo prisa las apremio para que acaben de comer, para que se vistan, para que salgamos de casa antes… y si no lo hacen me enfado.

No hay una maternidad idílica, en la que todo es una balsa de aceite. Claro que me enfado con mis hijas. Y a veces pienso que necesito un fin de semana para mi sola.

Porque el agotamiento fisico y mental es, para mi, lo más oscuro de la cara B de la maternidad.

Me hace actuar como no quiero, como no debiera. Y eso me causa enfado conmigo misma, y fustración como madre.

Ya lo he dicho en más de un post, es algo en lo que trabajo cada día, le pongo mucho empeño.

Y no para ser una madre pinterest como algunas compis blogueras lo llaman, sino para ser la madre perfecta por y para mis hijas.

La maternidad siempre tendrá un lado un poco más oscuro, porque somos humanos, no robots, y siempre habrá algo que nos sobrepase en cuanto a nuestros hijos se refiere.