Sexo y colecho, incompatibles?
Para nada!!
Hoy he leído a una mamá bastante agobiada con este tema.
A día de hoy parece que si no haces colecho no eres buena madre. Pasa como con la decisión de dar bibi o teta, de dar chupete o no, etc.
Cada mamá debe tomar la decisión que mejor se adapte a sus necesidades y a las de su bebé, dejando de lado la opinión generalizada.
Y nunca debe sentirse juzgada, o sentirse mala madre, como era el caso de esta mamá.
Todos conocemos los beneficios del colecho.
El niño que duerme con sus padres se siente confiado y tranquilo, sin miedos.
Su sueño es de más calidad, en general lloran menos y duermen mejor.
Favorece la lactancia, es lo más cómodo para la mamá y el bebé. Y eso ayuda al descanso de los papás.
Aparentemente todo son beneficios, aunque no nos engañemos, dormir con un bebé, sobretodo a medida que va creciendo, también puede ser incómodo e incluso doloroso. Quién no se ha llevado una patada durante la noche?
Ahora bien, yo comprendo perfectamente a la mamá que os comentaba. Me encanta tener a mi bebé cerca, dormida pegadita a mi, pero también necesito dormir abrazada a mi pareja, tener nuestros espacio, nuestros momentos de intimidad.
Entonces, el colecho y el sexo son compatibles? Claro que si!
Es el momento de agudizar el ingenio y dejar volar nuestra imaginación. Aprovechar para tener encuentros sexuales en sitios de la casa en los que no es habitual. Dejemos de lado el clásico, en la cama y por la noche.
Busquemos otras alternativas, hay que aprovechar sus siestas, ese rato en el que se quedan embobados con una peli de dibujos, y es en esos momentos en los que nos escaparemos a algún rincón a darnos amor y placer.
Que el hecho de que el bebé duerma con los padres no sea nunca un impedimento para los momentos de pareja.
Ya sabemos que habrá días en los que no será posible, porque justo en ese momento se despiertan de la siesta o ya nos les apetece ver la tele. Pues nada, a esperar otro momento oportuno.
A pesar de todo esto, hay que entender que haya quién lo vea muy complicado. Y por diferentes motivos, decida no colechar, y pasar al bebé a su habitación. Es tan respetable como cualquier otra decisión.
Cada familia es un mundo, y deben tomar las decisiones que mejor convengan a cada uno.
Y no juzgar jamás las decisiones ajenas.
Nosotros, con la mayor hicimos un colecho a medias, y con la pequeña lo hemos hecho diferente. Tiene su cuna pegada a mi, y pasa a nuestra cama casi cada noche, en algún momento, porque lo necesita y lo reclama.Pero hemos intentado que nuestra intimidad no se vea afectada, en la medida de lo posible.
Así que sexo y colecho pueden ir de la mano, sin problema. Querer es poder.
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